
En noviembre de 1978, Roberto Gómez Bolaños, mejor conocido como Chespirito, y el elenco de El Chavo del 8realizaron su primera visita oficial a Guatemala, presentándose en el Estadio del Ejército el 5 de noviembre. El evento fue organizado a beneficio de la Asociación de Locutores de Guatemala y contó con personajes emblemáticos como Don Ramón, La Chilindrina, el Profesor Jirafales y el Señor Barriga.
La calidez del público guatemalteco fue inolvidable. Bolaños lo recordó así: “Guatemala fue el primer país que pasó mis programas fuera de México, los quiero mucho”. Desde su arribo, los fans llenaron los alrededores del aeropuerto La Aurora y acompañaron al comediante hasta su hotel, reflejando el profundo cariño que generó entre todas las generaciones.
Este vínculo se fortaleció en una segunda visita en febrero de 1987, en la que también realizaron presentaciones y actividades conmemorativas, ampliando aún más su legado en Guatemala. La transmisión en abierto de El Chavo del 8 en Guatemala fue pionera: fue el primer país fuera de México en emitir oficialmente el programa, consolidando su impacto cultural en la región.
Décadas después, ese vínculo sigue vigente. Las redes sociales y medios recuerdan con nostalgia aquellos días en que Chespirito visitaba el país y llenaba estadios, mientras sus personajes se convirtieron en un referente de humor blanco y familiar en los hogares chapines.
Hoy, la visita de Chespirito a Guatemala no solo es un recuerdo del pasado; es un símbolo de conexión cultural entre países, generaciones y corazones que aún ríen con aquellos clásicos de la vecindad.
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